martes, 7 de febrero de 2012

De una simplicidad minimalista


Mas sencillo imposible. En apariencia. Porque en las fotos del medio podéis observar que se trata de dos y un solo cuadernillo y es la tapa la que debe doblarse lo necesario. Y las cosas tan simples no suelen serlo tanto.


Mirad qué maravilla este de un solo cuadernillo sujeto por una varilla dorada en el exterior. Pero hay que imaginarlo primero y hacerlo así después.


Y este sencillo triángulo de papel qué buen ornamento acaba siendo!


































Papel y más papel, ¿puede haber más humildes materiales? y qué belleza elegante consigue.

Todos estos libros y muchos más, son obras de Carmencho Arregui. Si buscáis su nombre en Google, os aparecerán muchas encuadernaciones suyas y otras hechas siguiendo sus indicaciones, principalmente referidas a la estructura cruzada.  Esta encuadernadora es, además, generosa y encabeza su web citando a García Márquez  : "Las ideas no son de nadie, andan volando por ahí, como los ángeles" y explica cómo se hacen. Eso sí, está un poquito en inglés.

http://www.outofbinding.com/

1 comentario:

J.de los Ríos dijo...

Es lo sencillo llevado a genialidad, claro que para llegar hay que tener creatividad y oficio.